En el cuadragésimo día del cierre de Administración más largo de la historia estadounidense, el proceder de ocho legisladores demócratas se percibe como un indicio del fin de la crisis que puso en jaque la estabilidad económica, alimentaria y del transporte en el país. Los senadores votaron, junto a sus pares republicanos, para alcanzar la mayoría de votos requeridos para aprobar el paquete presupuestario. Enfrentó resistencia por los cortes financieros a programas de salud que benefician a unos 20 millones de civiles.

De acuerdo a la CNN, el acuerdo consiste en “la reapertura del gobierno, a cambio de un futuro voto republicano a favor de extender los subsidios para la Affordable Care Act (en español: Ley del Cuidado de Salud a Bajo Precio)”. John Thune, líder de la mayoría del Senado, prometió que el voto sucederá a mediados de diciembre. A través del consenso, se extenderá el financiamiento temporal hasta enero y se revertirán las suspensiones de trabajadores federales.

Ahora, el resultado de esta negociación debe someterse a debate antes de que los senadores aprueben el proyecto final. Posteriormente, la medida pasará a la Cámara de Representantes, cuyos miembros están a la expectativa para votar esta semana.

Debido a la falta de control del tráfico aéreo, 2.700 vuelos fueron cancelados y 10.000 tuvieron retrasos, informó el portal FlightAware. En una conferencia de prensa, Nick Daniels, presidente de la Asociación Nacional de Controladores de Tráfico Aéreo, se pronunció sobre la presión y estrés que la crisis provocó en los trabajadores en este rubro, que hoy están trabajando sin remuneración.