El vicepresidente estadounidense, JD Vance, reconoció el miércoles la magnitud del reto que implica desarmar al movimiento islamista palestino Hamás y reconstruir la Franja de Gaza. Estas tareas son pilares esenciales del alto el fuego negociado por Washington entre Israel y el grupo palestino.

«Tenemos una tarea muy difícil por delante: desarmar a Hamás y reconstruir Gaza, para mejorar la vida de la población de Gaza, pero también para garantizar que Hamás ya no represente una amenaza para nuestros amigos en Israel», declaró Vance durante una conferencia de prensa en Jerusalén junto al primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu.

Ofensiva diplomática y optimismo cauteloso

La visita de Vance forma parte de una ofensiva diplomática de Washington cuyo objetivo es reforzar el apoyo al cese de hostilidades y los planes de reconstrucción impulsados por el presidente estadounidense, Donald Trump. Como parte de esta gestión, el jefe de la diplomacia estadounidense, Marco Rubio, también viajará a Israel el jueves.

A pesar de la violencia reportada el pasado fin de semana, el vicepresidente Vance había expresado previamente su «gran optimismo» respecto al mantenimiento de la tregua, en una conferencia de prensa ofrecida el martes en la ciudad de Kiryat Gat, al sur de Israel.

Sin embargo, Vance señaló que no se establecerá una fecha límite para el desarme de Hamás. Israel sospecha que el grupo ha aprovechado la pausa en los combates para reafirmarse en Gaza, mientras que el grupo islamista se ha negado a considerar su desarme, redesplegando a sus combatientes en varias zonas y enfrentándose a grupos armados que acusan de «colaborar» con Israel.

Visión para «el día después»

En la misma conferencia, el primer ministro Netanyahu aseguró que se están debatiendo activamente ideas para la gestión de Gaza en «el día después» del alto el fuego.

«Estamos creando un día después increíble con una visión completamente nueva de cómo establecer un gobierno civil, cómo garantizar la seguridad allí y quién podría proporcionarla», afirmó Netanyahu. Aunque reconoció que «no será fácil», el líder israelí sostuvo que «es posible», añadiendo: «Realmente estamos creando un plan de paz y una infraestructura aquí donde no existía nada hace apenas una semana y un día».

Impulso a los acuerdos de Abraham

Vance también destacó el potencial del acuerdo sobre Gaza para generar alianzas más amplias para Israel en la región de Medio Oriente.

«Creo que este acuerdo sobre Gaza es fundamental para desbloquear los Acuerdos de Abraham», dijo Vance, refiriéndose a los pactos de normalización de 2020. El presidente Trump busca reactivar estos acuerdos, que se concluyeron durante su primer mandato entre Israel, y Emiratos Árabes Unidos, Baréin y Marruecos. El vicepresidente concluyó que el acuerdo podría permitir «una estructura de alianza en Oriente Medio que persevere, perdure y permita a la gente de bien de esta región, del mundo, tomar la iniciativa y asumir la responsabilidad de su propio territorio».