El fiscal general de Honduras, Johel Zelaya, denunció una «conspiración contra las elecciones» y ordenó a la Agencia Técnica de Investigación (ATIC) intervenir el Consejo Nacional Electoral (CNE). La acción busca indagar sobre las denuncias de boicot al cronograma electoral, que, según Zelaya, ha estado paralizado durante un mes debido a la inacción del CNE.

«Hay un Ministerio Público al que no le interesa si son altos funcionarios. Vamos a ser fuertes y a presentar los requerimientos que tengamos que presentar», advirtió Zelaya, instruyendo a la ATIC a actuar con contundencia y a detener a quien se oponga a la entrega de información.

La intervención ocurre en un ambiente de alta tensión en el órgano electoral, marcado por la renuncia «condicionada» de la consejera electoral Ana Paola Hall, quien denunció intimidaciones políticas.

A esto se suma el cuestionamiento del consejero Marlon Ochoa, quien acusa a la consejera presidenta, Cossette López, de modificar el sistema TREP, lo que, según él, viola la normativa vigente. Ochoa considera que este nuevo modelo es similar al utilizado en 2017, conocido como la «Curva de la Batson», asociado a un presunto fraude electoral que permitió la reelección de Juan Orlando Hernández.

El fiscal Zelaya enfatizó que el Ministerio Público está al servicio del pueblo y no de intereses particulares. Recordó, además, que «hubo un CNE que quedó solo a medianoche, y militares de baja escala subiendo maletas electorales», en referencia a anomalías ocurridas en las elecciones primarias del 9 de marzo, y reiteró que su institución actuará con firmeza ante cualquier amenaza.